Pongamos que hablo de vivir (XLII)

JOSÉ ANTONIO CARBONERO FERNÁNDEZ
(Técnico de la Cooperativa Olivarera Ntra. Sra. de Luna de Vva. de Córdoba)


Podría aseverar que la verdad es como el aceite, siempre sale a la superficie, como sabemos, en el caso de esta grasa al ser mezclada con agua siempre sucede lo mismo, incluso aunque se empuje hacía el fondo del recipiente en cual se haya contenida, sube y sale a la luz. De igual modo ocurre con la verdad, bien es cierto que en el caso del aceite, se debe a su densidad, al ser inferior a la del agua esto provoca que no se mezclen, en el caso de la verdad, nos enfrentamos a muy diversos factores como ahora veremos.

Calidad y verdad suelen ser siempre buenos argumentos de venta, pero a veces se intenta camuflar sobre “calidad absoluta” y “verdad verdadera” los argumentos más insospechados, se podría decir por tanto, que según desde el prisma desde donde se mire, estos atributos tienen unas aristas u otras, depende siempre del punto de mira desde el cual se observe.

El pasado lunes leía un interesante artículo al respecto de lo anterior, en el portal “AOVE SOUR & HOT” siempre encuentra uno asuntos interesantes, bajo el titulo: “Que no te engañen al comprar un AOVE (Aceite Oliva Virgen Extra): 10 Consejos”, versa sobre la situación, bastante habitual por desgracia, que suele acontecer cuando un consumidor quiere comprar un producto, en este caso AOVE, que no conoce, y ha de confiar en la etiqueta, en su impresión o su intuición o bien, en lo que el vendedor le diga acerca del mismo.

Decía que hay referencias graciosas y muy interesantes en el mismo, frases como: “Vendemos el mejor aceite del mundo”, es una afirmación pretenciosa pero tema harto complicado, pues un producto como el aceite no puede cumplir con ese requisito, son tan amplias y excelsas sus cualidades que difícilmente pueden ser catalogadas, y menos hacerlas coincidir, por ejemplo, sabor y gusto, en dos personas a la vez, independientemente de que sean expertos o no.

Otro dato interesante, es el color, no por ser mas amarillo o por ser más verde es mejor un AOVE, hay que analizar una importante cantidad de datos para tomar esta decisión, como la variedad, momento de recolección, el tratamiento, etc., ese es el asesoramiento al cual me refiero, y el que necesita un consumidor para estar informado. Por supuesto, si vamos a comprar un aceite y resulta que el contenido de la botella es de color anaranjado, ni se nos debe ocurrir comprarlo, puesto que esta oxidado.

No siempre hay que confiar en: “Si es caro es bueno”, lógicamente esta es una reflexión muy extendida y generalizada, pero no tiene porque ser así ¿verdad?, ya hemos visto a lo largo de nuestros artículos y reflexiones sobre el AOVE que su calidad depende de muy diversos factores, por tanto, no solo el precio inclinará la balanza en uno u otro sentido. Tampoco todo lo ecológico es lo mejor, es decir, la producción ecológica es una forma de producir determinada, pero ello no implica que se hagan las cosas bien o mal, hay AOVE extraordinarios ecológicos y otros que siendo ecológicos no lo son tanto, al igual que sucede con los AOVE convencionales o de producción integrada, hablando claro, de todo hay en la viña del señor.

También nos encontramos con otra arista que les decía antes muy importante, lógicamente enfocada para llamar la atención del consumidor, es la del diseño, al igual que sucede por ejemplo con las ginebras Premium o las botellas de vino, se nos presentan unos envases realmente innovadores y muy bonitos, con colores muy llamativos y etiquetas realmente sorprendentes, pero no debemos soslayar este dato, hemos de tener bien presente que lo importante es el contenido la botella y no el exterior.

Con respecto al término primera presada en frío, hay que mencionar que es una forma de extracción del AVOE, como siempre decimos en este caso, debe ser mecánica y a baja temperatura, pero también es una manera de hablar, pues hace más de 40 años que las prensas no se utilizan en las Cooperativas y Almazaras productoras de AOVE, por tanto, pese a no dejar de ser una herramienta de venta, no es la verdad. En definitiva, hay muchas formas de decir la verdad, muchas aristas, lo importante es conocer cuál de ellas es realmente la verdadera y cuáles son las prescindibles de atención.


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