La portada de la Feria

EMILIO GÓMEZ
POZOBLANCO


Habían hablado mucho de la nueva portada para la feria que venía. Se estrenó. Gustó. Estaba llena de rosas de colores. Muy elegante y, a la vez, llamativa. La portada es siempre una parte esencial de todo. Es lo primero que ves y es con lo que te quedas. Todos nos acordamos de las portadas de los libros de la escuela que tuvimos. Compras un libro para leer por el autor y el contenido, pero lo que te llama la atención es la portada del mismo. Uno quiere tener siempre arreglada la portada de su casa, de su campo. La portada es lo que se ve. Dicen que se están echando miles de fotos ante ella. Gente que posa allí con un amigo, con su pareja, con sus hijos, con sus abuelos. 



Ya en las entrañas del Recinto Ferial, antes de que el alcalde le diera al botón del encendido, los caseteros ultimaban sus detalles. Los de los puestos colocaban su género y los sitios de copas probaban la música que iba a sonar esa noche. Todo listo. A los pies de la portada se arremolinaba la gente para esperar a la comitiva que a lo lejos se escuchaba. La Banda de Música abría paso. Mientras se encendía, los niños discutían con sus papás acerca de los viajes que iban a tener en los cochecitos. La portada se iluminó. Caras de admiración cuando las bombillas encendieron. Aplausos. Encendida la portada y el alumbrado del Recinto Ferial, todo dio comienzo (la feria, los fuegos, la música). Farolillos de tono rojizo, anaranjados, amarillos y blancos adornaba un cielo que no va a traer agua (o eso dicen). La variedad cromática de la portada, de las luces, de los farolillos y de la feria ha cambiado mucho en los últimos años. 



Vienen días entre vestidos bonitos y fiestas de noche, entre músicas de baile y representaciones teatrales. Feriantes donde su casa no está en ninguna parte. Nostálgicos que bailaban en pareja. Adolescentes que descubren un mundo fuera de la mano de sus padres. El encanto de las noches de feria. Hoy viernes empieza el apretón fuerte. Y mañana, sábado, todavía más. Las ferias son días de diversión. Como todo, tiene una portada por la que entrar. 







/Fotos: SÁNCHEZ RUIZ

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