El cuento lleno de mentiras relativo a las pensiones

MIGUEL CARDADOR LÓPEZ
(Presidente-Editor)


Después de ver la cantidad de mentiras y medias verdades (que a veces son peores que las propias mentiras) sobre lo que concierne a las pensiones y el desconocimiento que existe sobre las mismas, me veo en la obligación de hacer este artículo para, humildemente, poner un poco de claridad sobre las mismas, al mismo tiempo que me propongo no volver a hacerlo más en un buen tiempo.

Lo primero que todos tenemos que entender es que las mismas no las paga ningún gobierno o partido político que esté en el gobierno. Todo sale de las cotizaciones que se hacen primero en los trabajadores contratados por cuenta ajena, donde el empresario hace un 80% y el trabajador un 20% aproximadamente del total mensual que se paga a la Seguridad Social. También, lógicamente, de las cotizaciones de los trabajadores que están en otros regímenes, como, por ejemplo, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA).

Los primeros que tienen que explicar esto son los partidos políticos. Y no confundir, ni prometer algo que será imposible, como a continuación explico.

Hay bastantes trabajadores que cuando lleguen a la edad de jubilarse habrán tenido muchos años de cotización, y con una buena base de cotización, con lo cual habrán aportado un buen dinero a las arcas de la Seguridad Social.

Por ejemplo, un trabajador que haya cotizado 40 años, terminando con una base de cotización de 1.700 €, habrá aportado unos 235.000 € durante su vida laboral a la Seguridad Social.

Por el contrario, también está el trabajador por cuenta ajena o el trabajador autónomo que, pudiendo haber cotizado más, no lo ha hecho. En una parte porque habrá personas que no han podido, pero en otra, no minúscula, porque directamente no han querido. Tal vez porque en este segundo caso se ha llevado una vida más mirando sólo al corto plazo, y simplemente no se ha querido aportar con arreglo a los ingresos mensuales que realmente se tenía.

Un trabajador en el Régimen General que ha cotizado durante 40 años con una base media de 1400 € y otro que ha cotizado en autónomos durante 40 años con una base media de 890 €, aunque tiene la misma cantidad de años cotizados, el primero ha aportado una cantidad total con IPC, actualizado de unos 200.000 € a la Seguridad Social mientras que este segundo sólo habrá aportado 117.000 €.

En este ejemplo situamos a una persona que al final de su vida laboral tiene 25 años cotizados, con una base de cotización de 1100 €. Este habrá aportado en total a la Seguridad Social unos 125.000 €.

Otro ejemplo son las empleadas de hogar, donde le han vendido una moto que no tiene ni ruedas. Primero porque hay muchas personas integradas en este régimen que cotizan con una base que está por debajo de las horas que trabajan. Unas porque el propio empleador lo exige así, y otras porque es la propia trabajadora la que lo prefiere para cobrar una parte en negro. La media de este sector está cotizando por una base de alrededor de 450 €, con lo cual, aunque cotice 30 años, no habrá aportado ni 38.000 € en toda su vida laboral.

Pero todavía más sangrante es el caso de una parte que no llega a cotizar el mínimo de los 15 años para tener derecho a cobrar una pensión contributiva. Y de nuevo aquí los hay de todos los colores. Yo voy a poner un ejemplo real de un hombre de Córdoba capital que en la actualidad tiene unos 75 años, que fue jugador del Córdoba, jugando en Segunda División y alguna temporada en primera. Una persona que ha llevado un tren de vida muy alto, comidas en buenos restaurantes, viajes alrededor del mundo, buenos coches, etc. Bueno, pues cuando este hombre tenía 66 años, me sorprendió de forma negativa, pues él solo había cotizado 6 años en toda su vida laboral, como autónomo y con la base de cotización mínima.

Este hombre va a cobrar una pensión no contributiva, por no tener ingresos, y yo me pregunto, ¿es justo que esta persona que ha vivido a todo tren y en muchas ocasiones hasta derrochando, ahora tengamos que pagarle con nuestros impuestos una paga aunque sea baja?

En el mismo paralelismo, es como si yo cuando llegue la feria de Pozoblanco le digo al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Pozoblanco, que como no me ha dado la gana de ahorrar 10 € cada semana para la misma, que me regalen el abono de toros, que me den entradas de teatro y me dejen pagadas las comidas de los 5 días de feria en la caseta que yo les diga. Si no lo hacen me manifestaré con una pancarta en la puerta del ayuntamiento diciendo lo malos y egoístas que son.

El pasado mes la Seguridad Social tuvo que desembolsar 8.985 millones, un 3´01% más que hace un año, para hacer frente a las nóminas de casi nueve millones de pensionistas que hay en España.

También es significativo el dato de que las pensiones más altas se cobran en el País Vasco con una media 1.339 €, mientras que la más bajas se cobra en Extremadura con 893 €.

Yo quiero ser solidario y ayudar al que lo necesita, pero las partidas de pensiones no contributivas o complementos a mínimos por pensiones contributivas bajas, deben de salir de otro apartado de los presupuestos generales, pero no de la hucha de las pensiones, que ya es deficitaria, porque se necesita más dinero para pagarlas de lo que se ingresa por cotizaciones. Lo malo es que este déficit irá en aumento en los próximos años, porque el número total de pensionistas irá aumentando.

No se puede ser frívolo, ni hipócrita con este tema tan serio. Y sobre todo lo que no aguanto es la cara dura de la mayoría de políticos profesionales de todos los partidos, que dependiendo de si están gobernando o en la oposición dan un discurso que varía 180º. Pero claro como la mayoría de ellos van a cobrar la pensión máxima, ellos miran primero para ellos, segundo también para ellos y su familia y tercero, si sobran algunas migajas, para los tontos a los que han engañado.

Lo dicho, para tener una pensión de jubilación medio digna, solo se necesita tener años de cotización y una base media que no baje de los 1300 €, lo demás son cuentos de caperucita y el lobo feroz.


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