25 años de la Mancomunidad de Municipios de Los Pedroches

EMILIO GÓMEZ
(Periodista-Director)


Evidentemente, si vivimos en un pueblo y queremos hacer algo tenemos que estar unidos. La unión entre los pueblos es vital para mantener el desarrollo de los mismos y sus tradiciones. Hace 25 años se creó la Mancomunidad de Municipios Los Pedroches. Una idea genial en la que se tiene que creer. Para ello se tienen que hacer las cosas bien. A la Mancomunidad se le ha acusado mucho de estar ‘politizada’. No sabemos si esto es verdad o no. Lo que sí está muy claro es que la Mancomunidad tiene sentido si es participativa y si no tiene colores. Se tienen que priorizar los intereses de las personas a los políticos. Se tienen que priorizar los pueblos a los signos políticos que gobiernen en cada pueblo. Juntos sumamos más y nos podemos vender mucho mejor. Pero nos caracterizamos por estar poco unidos y eso nos está matando también, preocupados de ser más que el vecino, o presumir que un pueblo tiene más que otro. O mirar hacia otro lado si en otro pueblo tienen un problema. Un torpeza porque estamos en la misma tierra. Nuestra comarca no es peor que otra. Tiene algo que otras no tienen. La gente es emprendedora. En pocos sitios se ven tantas personas luchadoras como aquí.

El problema de nuestros pueblos es la despoblación. Esto nos está dejando con pocos jóvenes, con un futuro incierto y con los servicios básicos muy dañados. Estamos viendo en los últimos meses como no se encuentran profesionales para venir al Hospital Comarcal. La gente piensa que aquí la vida es de segunda categoría y el desarrollo de tercera. Y en ocasiones esto sucede por el desamparo al que nos tienen sometidas las administraciones. El estado de las carreteras, la ausencia de una autovía y de oportunidades de trabajo, la ausencia de centros donde se impartan ciclos superiores y el tener menos acceso a las oportunidades tecnológicas nos limita mucho. Creo que a las Administraciones no le interesa poner de moda el vivir en los pueblos. Más bien los contrario.

La Mancomunidad de Municipios no debe ser una administración más. Tiene que ser un órgano que batalle por su zona y la defienda (sin partidismos). La batalla no debe ser interna sino externa para pedir cosas para nuestra zona. Sacando las bondades que tienen sus pueblos y dándole valor. Tenemos una dehesa que es la mayor dehesa del mundo y la cuna del ibérico. Dehesa que se muere. Cada año se muere una encina por hectárea. En algunos casos la media es superior. La ‘seca’, las nefastas políticas europeas sobre ayudas a pastos, la escasa defensa de las administraciones, el control de la carga ganadera, el precio a la baja del ganado que habita en ella. Todo ello está provocando la lenta muerte de este ecosistema único en el mundo. La Dehesa desaparecerá si no hacemos algo.

Además tiene un valor turístico enorme. El paisaje que ofrece es único. Mucho más si le añadimos la cultura que hay alrededor de ella, con sus cortijos, hileras interminables de paredes de piedra, caminos con siglos de historia, cuadras y zahúrdas. Tenemos que vendernos mejor turísticamente. Quizás promocionándonos más. Decía Henry Ford dijo que “quien deja de hacer publicidad para ahorrar dinero, es como si parara el reloj para ahorrar el tiempo”. Muchos pueblos de España han tenido una partida para promocionarse a nivel nacional. Algunos de esos pueblos con menos que ofrecer que nosotros. Si la cultura que envuelve el regalo de la Dehesa es espectacular, no menos es la cultura de nuestra sierra. Nos ha faltado promoción.

Tenemos que tomar conciencia de la despoblación. Las muertes están superando con contundencia a los nacimientos, la gente se está marchando de los pueblos, la dehesa se está muriendo, la autovía no llega. Esto nos está haciendo ser una zona menos atractiva. Y las consecuencias están siendo evidentes. El ambiente en los pueblos es pesimista, bajo expresiones como: cada vez somos menos, los jóvenes se van, esa casa se ha caído, los accesos no mejoran, todo eso está a la orden del día. Todo es verdad. Y en un tiempo donde se dice que el pueblo es origen, principio y fundamento de dónde venimos todos. Ahora todo el mundo quiere tener uno para poder presumir de ese lugar al que acudir y recurrir a fin de hallar ese espacio personal y único que nos distingue y nos marca. Es por ello que hay que buscar soluciones fuera de las guerras políticas. Que no son las nuestras. A nosotros nos interese que nos salven (sea quien sea). Y necesitamos venderla dentro (comprando nuestros productos), fuera (promocionando lo que hacemos aquí) y en las instituciones (exigiendo lo que es nuestro). Y aventurarse. Tenemos que dar un pasito más pues no frenamos la huida de nuestros habitantes. No sé si nos estamos dando cuenta pero nuestros jóvenes se nos marchan.

La Mancomunidad celebra este sábado su aniversario. Hay que luchar para que no desaparezca. Y para ello habrá que intentar que todos los habitantes de los 17 pueblos se identifiquen con ella. Todavía no se ha conseguido. Incluso hace dos años Emiliano Pozuelo amenazó con la salida de Pozoblanco de ella. Si no se cree en la Mancomunidad, no generará confianza. Y eso es muy importante. Las actividades que organiza la Mancomunidad fueron más numerosas en otro tiempo. Como comentaba Antonio Merino se vivió una crisis económica en la Mancomunidad de la que le costó reponerse, se cambió de sede (de Añora a Alcaracejos), un movimiento que fue visto como un ‘cambio por motivos políticos’ y hubo una tibia actuación en la petición popular de que el tren parara en Los Pedroches.

No ha habido la unión política esperada. Aún así, es necesaria. Pero debe admitirse que hay que mejorar esa unión. Pedimos a los ciudadanos que se unan pero también a nuestros representantes. Falta compromiso de todos con el futuro de Los Pedroches. Es una tierra de 17 pueblos (todos importantes). Juntos sumamos mucho más. Haciendo la guerra cada uno por su lado seguiremos perdiendo población. Este sábado en el Centro de Interpretación de las Siete Villas, se vivirán momentos especiales. Son las bodas de plata de la Mancomunidad de Municipios. La idea de unir los 17 pueblos fue sencillamente maravillosa. Si nos uniéramos de verdad podríamos ser todos más fuertes. Después de 25 años de la creación de la Mancomunidad tenemos una comarca mucho más despoblada. Hace la falta esa unión en la Mancomunidad pues los problemas están encima de la mesa y son muy graves.


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