La Semana Santa del 2019, afectada en parte por la lluvia

ANTONIO M. CABALLERO
POZOBLANCO

La Semana Santa comenzó con buen tiempo el Domingo de Ramos con las procesiones de la Borriquita. La estabilidad duró hasta el Miércoles Santo cuando apareció la lluvia aunque de forma casi testimonial.

El Jueves Santo sí hubo aguaceros por la mañana y por la noche y el Viernes Santo la lluvia llegó acompañada con tormenta al mediodía y con una caída notable de las temperaturas.

Finalmente, el Domingo de Resurrección las nubes no impidieron el desarrollo de los desfiles.

En Hinojosa del Duque, el Viernes Santo volvió a ser un año más muy intenso ya que por la mañana salía, desde la parroquia de San Juan, la estación de penitencia de Nuestro Padre Jesús con la Cruz a cuestas y la Virgen de los Dolores y la procesión de Nuestro padre Jesús Nazareno y el Cristo de la Caridad. Por la noche, con algo de frío pero sin lluvia recorrieron las calles hinojoseñas el Santo Sepulcro y Nuestra Señora en su Amargura y finalmente, María Santísima en su Soledad.

En Villanueva de Córdoba, en la medianoche ya del Viernes Santo la procesión del Cristo de la Buena Muerte se tuvo que quedar en San Sebastián ante la previsión de lluvia. Por la tarde tampoco hicieron su estación de penitencia Jesús Yacente y la Virgen de los Dolores por las malas previsiones meteorológicas, una procesión que incluye cada año la representación de todas las cofradías. Los braceros del Señor Yacente estrenaban en su uniforme el escudo alusivo a esta advocación.

En Pozoblanco, el Miércoles Santo se quedó en San Bartolomé Nuestro Padre Jesús Rescatado Cristo de Medinaceli, que no obstante salió a la puerta del templo para encontrarse con la gente del barrio y de Pozoblanco. Una hora estuvo el público esperando ver al Medinaceli portado por los braceros.

El Jueves Santo salía con algo de retraso la Cofradía Salesiana del Santísimo Cristo del Perdón, Nuestra Señora de la Amargura y San Juan Bosco porque se estuvieron consultando las previsiones meteorológicas. Tras una magnífica salida ante las muchas personas congregadas en la Plaza de los Padres Salesianos, todo se torció cuando la cruz de guía bajaba por el bulevar. Empezó a llover y con intensidad. El paso de palio de la Virgen de la Amargura dio la vuelta en la parte más alta de la calle Santa Marta y lo mismo hizo el Cristo del Perdón que estaba a la altura del cruce con la calle San Antonio.

Hay que destacar la extraordinaria labor de costaleros, costaleras, capataces y ayudantes de guiar los pasos por la rapidez, a paso muy ligero, con la que se volvió a la iglesia de María Auxiliadora de los Salesianos. Ambos pasos se mojaron y mucho, pero la Cofradía señaló que afortunadamente no hay que lamentar daños.

En la Madrugada del Viernes Santo, la Cofradía de Soldados Romanos y Penitentes realizó el ceremonial del Prendimiento pero acortó el recorrido desde la Carrera Oficial. Por la tarde, salió el Santo Entierro aunque acortando el recorrido y la Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad realizó su recorrido completo, como ayer hizo la Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos de Jesús Resucitado y Nuestra Señora Santísima de Luna. 
















/FOTOS: SÁNCHEZ RUIZ, ANTONIO J. DUEÑAS Y LUNA BENFER

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