viernes, 5 de abril de 2019 | 8:30 1

Entrevista a Carmelo González, Bar Casa Carmelo



“Conservamos nuestra esencia y mejoramos”

ANTONIO MANUEL CABALLERO
POZOBLANCO

Bar Casa Carmelo estrena ubicación desde esta semana. El local, situado junto a la ermita de San Gregorio (antiguo bar Reyes) abrió ayer jueves para seguir siendo, como hasta ahora, referencia culinaria y en cuanto al buen ambiente se refiere.

Carmelo González comenta que ha incorporado nueva gente a la cocina.


– ¿Qué ofrecerá a su clientela?
– Como siempre la mejor gastronomía, porque cuidamos mucho la cocina. Además, estaremos abiertos a las 7.00 horas de la mañana para ofrecer deliciosos desayunos y luego tendremos menús diarios con nuestros arroces y carnes de Los Pedroches y también cenas. Y por supuesto, algo tan nuestro como las aparcerías de mediodía.

– ¿Qué ventajas destacaría de este nuevo emplazamiento?
– Pues el lugar dónde se encuentra en pleno barrio de San Gregorio con cercanía al hospital, el fácil aparcamiento que tiene y además como abrimos en esta época tanto la Semana Santa como las fiestas de San Gregorio servirán para darnos a conocer aún más. Por otra parte, tenemos una estupenda terraza para degustar también caracoles.

– ¿Qué destacaría de su oferta gastronómica?
– Por ejemplo las paellas, esos arroces especiales que preparamos, las carnes, ensaladas, revueltos y ahora en Cuaresma y Semana Santa con revueltos de espárragos con bacalao, entre otros. Por otra parte podemos preparar cualquier plato que nos encarguen, aunque eso sí, con antelación.

– ¿Cuántos años lleva trabajando en el mundo de la cocina?
– Desde 1992 pues yo venía de tener una pescadería y marisquería. Sabía de qué iba esto y me encantaba.



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1 comentario :

  1. Martin Marquez18 de abril de 2019, 11:10

    Deberían cuidar la cocina más, pedimos un flamenquin que vino quemado y muy seco por dentro, Carmelo insistía que el flamenquin se hacia así, cosa que estuvimos en total desacuerdo, y desechamos el plato, pero querían cobrárnoslo, al final ante nuestra insistencia accedieron. Yo pedí una ración de calamares que obviamente era pota y ojo que te cobran el pan.

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