La feria del látigo y de la nueva portada

EMILIO GÓMEZ
POZOBLANCO

Terminó la feria. El otoño ya está aquí. Septiembre será historia. El verano ya es un sueño pasado. Lo mismo le ocurre a la feria que ya es un recuerdo que nos dejó cosas:

La vuelta del Látigo después de 20 años ha sido una de las grandes novedades de la feria. La novedad era revivir viejos tiempos. La gente se subía y se subía al vagón de su adolescencia, a su atracción favorita donde posiblemente se enamoraron o quién sabe lo que hicieron. En los tramos rectos no pasaba nada, pero al llegar a las curvas el Látigo alcanza y alcanzaba una velocidad que te mueve todo el cuerpo. Una atracción casi desaparecida que ha vuelto esta feria a Pozoblanco. Qué recuerdos cuando de esta atracción estaba instalado por debajo del Verdura. Hasta la música que traía nos gustaba y sin olvidar ese chirrido cuando te pegaba el viaje al torcer. Muchos jóvenes de esta y otra época se subieron. Un acierto su vuelta. 



La modernidad también trae cosas buenas como la portada de la feria llena de rosas y colorido. Miles de fotos se han hecho en una portada en la que se han recogido abrazos y besos. Hubo mucha expectación entorno a una portada que no defraudó.

El enorme paseo de caballos. Este año mucho más numeroso. La actuación de la banda municipal sinfónica de Pozoblanco en el pregón y en la feria, donde nos deleitaron con un repertorio de pasodobles exquisito. La buena corrida de toros del sábado de pre feria con Ferrera y Emilio De Justo enormes. Luego en feria solo destacar los detalles de Galván y la faena de Ventura al quinto de la tarde en la que formó un alboroto cuando a su caballo, Dólar, le quitó la cabezada para poner un par de banderillas a dos manos.

Y una de las cosas que es de destacar es que la Feria se celebra en Pozoblanco pero es de toda la comarca de Los Pedroches. Mientras muchos `tarugos’ se van estos días unos días fuera de la localidad, muchos vallesanos vienen a la feria llenado las casetas, el recinto, acudiendo a los toros y las actuaciones. Se celebra aquí pero la feria en Pozoblanco es grande gracias a la gente de los pueblos de la comarca, como bien decía una amiga de Alcaracejos. 




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