Los jóvenes toman el mando del C. D. Pozoblanco

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viernes, 30 de agosto de 2019 | 1:35 0

Los jóvenes toman el mando del C. D. Pozoblanco

EMILIO GÓMEZ
POZOBLANCO 

Gonzalo. 

Gonzalo y David García superaron con nota el partido exigente que tuvo su equipo en Sevilla, en el primer gran partido en Tercera. Gonzalo es un joven portero de 20 años, quien con tres paradas magistrales dejó la portería a cero del Pozoblanco. David García es un joven juvenil quien tiene por delante una larga carrera en el fútbol. Primero demostró carácter. En él ni afloró la timidez de los novatos, ni la irresponsabilidad juvenil. Jugó como si llevara 60 partidos en Tercera División. Todas sus intervenciones en el partido estuvieron presididas por el criterio y la mayoría de ellas por la creatividad. Y eso que jugó de extremo donde no había jugado nunca. No le importó demasiado. El buen futbolista juega bien en todo el rectángulo. Demostró que es capaz de cambiar de velocidad en cada acción se encuentre donde se encuentre.

Javi De la Torre se la jugó con ellos. No es fácil darle una portería a un joven de tan pocos años (los porteros suelen ser los más veteranos) y un sitio en el equipo a un chavalín que tuvo el descaro de tener las dos mejores ocasiones de su equipo. Una se la creó él, de esas que se pintan a cámara lenta para degustarlas. Hubiera sido la leche que un juvenil hiciera el primer gol en Tercera después de cinco años. 

David García.

David García toca con naturalidad, es armónico, selecciona muy bien, se asocia con rapidez y es profundo. Añade mucho peligro a las jugadas, a pesar del déficit de potencia que se puede esperar de un juvenil. En más de una ocasión reclamó pases que no recibió. Tiene mucha visión de juego.

Es reconfortante en el fútbol la aparición de un joven jugador con talento de verdad. El chico apunta muy alto. Y también el otro, el portero quien cuenta que en el vestuario le dio un abrazo enorme Javi De la Torre. Hubiera bailado un tango con él si Gonzalo se lo hubiera pedido. Es cierto que los arqueros están ahí para parar pero no todos los balones son ‘cazables’. Este parecía llevar la capa de héroe. Llegaba siempre. A todos sitios. Se estiraba tanto que parecía que se iba a doblar.

Es un portero activo, cercano a la raya de gol pero también a la raya del área grande, con potencia, habilidad y destreza en el pie para iniciar jugada, espectacular en las paradas que hace y cuestionable en las salidas. Bueno en el mano a mano aunque tendrá que mejorar en los remates que permite. Tiene unas condiciones enormes. Valiente y con muchas ganas de todo. Sobre todo de ser futbolista. Una garantía entre los palos.

Partido sin goles pero con dos chavales como protagonistas del reparto de una película divertida.Los jóvenes fueron los que salvaron al Pozoblanco en su vuelta a Tercera. Quién lo iba a decir. Así es la vida. La sorpresa está a la vuelta de la esquina. Y por ahí aparece quien menos te lo esperas. En esa esquina aparecieron Gonzalo y David García. Venían como triunfadores. No les pesaba ni el calor que hacía en Sevilla en pleno mes de agosto.