Los tesoros gastronómicos de Villaralto

EMILIO GÓMEZ
(Periodista-Director)


La gastronomía de Villaralto tiene los días 9 y 10 de noviembre una cita importante: La Ruta de la Tapa. Una mezcla de sabores, olores y gastronomía. Los pueblos también se distinguen por su manera de comer y de preparar los productos autóctonos. Sabemos que, desde siempre, en Villaralto ha habido una buena cocina y que posee unos bares donde se pueden saborear las mejores delicias culinarias. El amor por la cocina de la tierra. Una tradición muy cuidada y exquisita. Los bares de Villaralto esconden pequeños tesoros.

Los establecimientos participantes son Bar Kariba Villaralto, Bar Moreno, Bar El Paisa Villaralto, Bar Higueras y Bar Sheyla. Todos guardan en secreto las tapas que van a poner. Cada uno en su estilo y en su especialidad. Un enorme crisol gastronómico con multitud de sabores que se podrán degustar entre una gran variedad de tapas. Es la quinta edición ya de una actividad que se ha consolidado y convertido en un referente provincial. Aroma, sabor, originalidad, exquisitez. El alcalde de la localidad, Ángel Moreno, destaca “que se disfrutará de una experiencia placentera, con unos productos que han sido preparados con mucho cariño por los diferentes bares de la localidad”. También con esta Ruta se favorece el cuidado de la tradición, en una sociedad que, cada vez más, se deja llevar por el fast food, la comida rápida.

Tapas típicas de Los Pedroches que fueron platos preparados en otro tiempo. Elaborados por las manos sabias de nuestros antepasados que nos dejaron un legado gastronómico valiosísimo aunque también la innovación está presente en los mismos. Quien acuda a Villaralto se va a encontrar como dice el alcalde “cocina casera, exquisita y buen trato”. Un buen ambiente donde en la variedad estará el gusto. La nueva propuesta de este año promete con el rutero con el que te puedes llevar un cheque regalo valorado en 80 € para consumir en tiendas de Villaralto y una cena para dos personas.

En definitiva, tapas ricas para degustar y comer en Villaralto los días 9 y 10 de noviembre. Parada obligatoria de todos los vallesanos. Calidad, cantidad y exquisitez. Yo me voy a Villaralto esos días. Y de paso, veo el Museo del Pastor.


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