La Cofradía de la Vera Cruz en Pozoblanco. Los Oficios del Jueves, la procesión de la Sangre y el Vía Crucis

ARTURO LUNA BRICEÑO


“Al recrudecerse el invierno me traslado a mi patria, situada en la “Beturia”, región la más apropiada para pasar esa rigurosa estación.

“Tanto más que a una edad tan avanzada ya como la mía la salud ya no está para estos trotes, como lo estaba cuando era joven; por eso prefiero el descanso y para los fríos del Invierno la rica lumbre del hogar. A viejos como a mí le vienen al pelo aquellas palabras del poeta Virgilio: “La lumbre en el Invierno y la sombra en el verano”

Desde que regresó a Pozoblanco en 1537, El Doctor Juan de Sepúlveda pasó casi todos los inviernos y parte de la primavera en su casa de la Plaza Pública del pueblo, hoy titulada Plaza de la Constitución. 

Cruz del Pago de Cerro Alto junto el Camino de la Campiña.


En 1554 estuvo gravemente enfermo, y él lo achacó a que era su “Año climatérico”, pero a pesar de ello pudo asistir el Jueves Santo a predicar su famoso Sermón del Labatorio, mientras les lavaba los pies a doce pobres. Este ritual abría los actos de la Semana Santa Antigua de Pozoblanco. Lo organizaba la Cofradía de la Vera Cruz, y al terminar se iniciaba la Procesión de la Sangre, y a su término a las dos de la madrugada se procedía con la larga liturgia del Vía Crucis, que hoy conocemos como “El Prendimiento”.

Pedro de Sepúlveda, clérigo y sobrino de Juan Ginés, que sustituía a su tío, cómo Canónigo en la Catedral de Córdoba, contó al Cabildo lo que hacía el Cronista el Jueves Santo en la Parroquia de Santa Catalina y el Cabildo lo invitó para que predicara su Sermón del Labatorio en los oficios del Jueves Santo en la Catedral. Hecho que ocurrió en el año de 1555. 

Juan Ginés de Sepúlveda.


Rafael Ramírez Arellano en su “Catalogo de Escritores Cordobeses” lo narra de esta manera:

“El obispo de Córdoba Don Leopoldo de Austria, (tío de Carlos V), le encargó la revisión del Breviario Cordobés que se iba a imprimir. Estando en Pozoblanco ya retirado, un sobrino suyo lo invitó a dar unos sermones en Córdoba. Su sobrino era canónigo en dicha capital. Gracias a estos sermones lo conoció el citado obispo”.

En, “Las Advertencias que deben tener presentes los que son Hermanos Mayores y Secretarios y Diputados de esta Cofradía para observancia y cumplimiento”, inclusas en el “Libro de Pellejo de la Cofradía de Limpieza de Jesús Nazareno” encontramos datos de cuál era la puesta en escena de este Sermón: “Lo décimo debe y es su cargo asistir con los Diputados y Secretarios a el “Labatorio” el Jueves Santo en la Iglesia Parroquial de Santa Catalina a las dos de la tarde para lo que llevará prevenido Flores y olores para el Presbítero y sitio del Labatorio. Una bacía de plata, dos cántaros o vasijas, el uno con agua caliente y el otro con fría y la toalla grande que tiene dicha Cofradía para este acto. Los Diputados echan el agua y el Hermano Mayor…”echa sobre los pies que se lavan agua de olores que llevan en un frasco o aguamanil”. 

La ermita de Jesús de la Columna.


Algunas de las piezas de plata que poseía el Cronista y que utilizaba en sus misas y actos litúrgicos estaban en un arca y fueron donadas a la Capellanía que tenía su sede en la Parroquia de Santa Catalina, hasta que Luis Ponce de Sepúlveda, que era su Capellán, hizo la ermita de Jesús Nazareno y trasladó los objetos de la Capellanía a Jesús Nazareno.

Terminado el sermón comenzaba la Procesión de la Sangre, en la que participaban los flagelantes y la imagen que la presidía era la de: “Jesús de la Columna”, que en los primeros años del siglo XVIII se trasladó de Santa Catalina a su Ermita.

De Madrugada, ya del Vienes Santo, por la Vía Sacra, (en el Catastro de Ensenada se citan cinco vías sacras que existieron en los siglos XVI, XVII y XVIII) salía la procesión del Vía Crucis cuyas imágenes eran la Virgen, San Juan, el Cristo de la Caridad y Jesús Nazareno. Imagen que era acompañada y escoltada por los sayones de la Vera Cruz. 

Protocolo de las pruebass de sangre de Juan Ginés de Sepúlveda 1515.



No hay comentarios :

Publicar un comentario