Covap, el paraguas que nos arropa y la I Ruta Violeta

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sábado, 5 de mayo de 2018 | 8:11 0

Covap, el paraguas que nos arropa y la I Ruta Violeta

MIGUEL CARDADOR LÓPEZ
(Presidente-Editor)


La gran locomotora, no sólo de nuestra comarca, también de la provincia, que es la cooperativa Covap, cerró el año con una facturación de 441 millones de euros, siguiendo su línea de incremento en los últimos años.

La cooperativa no solo da trabajo a más de 700 trabajadores directos, también están los cientos de indirectos, los miles de socios, sin olvidar lo que aportan, tanto la cooperativa, como la Fundación Ricardo Delgado Vizcaíno, a todo tipo de eventos en Los Pedroches, desde lo deportivo a lo cultural.

Hoy en día, cuando todavía hay mucha gente que tiene ciertos prejuicios a la hora de tener una visión global de comarca y se apegan con mentalidad cateta, corta y miedosa a los localismos, yo, si me lo permiten, les diría con toda humildad, que miraran hacia atrás, más de 50 años, donde un grupo de personas adelantadas a su tiempo, entre ellos D. Ricardo Delgado, se dieron cuenta que trabajando de forma individual estaban condenados al fracaso y sin ningún futuro. Sabían que tenían que sumar, unirse y hacer un esfuerzo colectivo si querían avanzar y supervivir en el futuro. Fueron pioneros en la visión de comarca como empresa, siendo un claro ejemplo para todos los que hemos crecido desde entonces.

Sinceramente, no entiendo que haya algunas personas que hacen críticas continuas en tertulias y conversaciones de taberna sobre Covap. Es lógico que la cooperativa siempre no lo va a hacer al 100% al gusto de todos, y parece como si algunos quisieran ver siempre la paja en el ojo de Covap, cuando a lo mejor ellos no se ven la viga que llevan en el suyo propio.

Yo pido porque la principal fuente de riqueza, prosperidad y empleo que tenemos en nuestra comarca jamás coja un resfriado, porque entonces estaría en peligro la supervivencia de Los Pedroches. Creo que debemos ser conscientes de que casi todos, directa o indirectamente, estamos bajo el paraguas de Covap.

Vaya desde esta página mis más sinceras felicitaciones a todos, desde su presidente, pasando por el más humilde de sus trabajadores, socios y personas que de forma indirecta trabajan para la misma. Yo, solo digo, que ojalá hubiera dos Covap en nuestra tierra.

Por otro lado tengo que felicitar a la Asociación Ventana Abierta, junto a las concejalas de Cultura e Igualdad del Ayuntamiento de Pozoblanco, por tener la iniciativa de crear la I Ruta Violeta, donde se pretende resaltar y recordar a mujeres que en el pasado dejaron una huella indeleble, por su trabajo y esfuerzo en distintos campos, siendo muchas de ellas pioneras y adelantadas a su tiempo, un tiempo muy machista que les tocó vivir, donde casi todo eran obligaciones y muy pocos los derechos.

Dentro de mi reconocimiento a todas ellas, me voy a centrar en una porque la conocí bastante bien y tuve el privilegio de trabajar junto a ella en su empresa. Me estoy refiriendo a la fundadora de la empresa Confecciones Nalo S.A., que lleva 50 años funcionando desde que se inició de forma artesanal.

Luciana López Cabello pasó la Guerra Civil en Córdoba, siendo una adolescente, y aprovechó que estaba en una casa de un familiar suyo para aprender de corte y confección, actividad que se incrustaría con fuerza en ella y perduraría en el tiempo, siendo el pilar fundamental de la creación de su empresa familiar, que durante estos 10 lustros de vida ha dado trabajo a cientos de trabajadores de ambos sexos, cumpliendo siempre lo que marcaba el convenio del textil y la confección a nivel nacional.

Luciana era una mujer extrovertida, de gran personalidad y sólido carácter, y además con un corazón inmenso. Recuerdo que en uno de sus bolsillos de su bata de trabajo siempre llevaba una cantidad nada despreciable de dinero, y una buena parte de ese dinero se lo daba a las muchas mujeres que le solicitaban ayuda por diversas necesidades.

Han tenido que pasar 25 años de su fallecimiento para que se le haga este más que merecido reconocimiento, pero como dice el sabio refranero español, “más vale tarde que nunca”.

Repito mi enhorabuena a las tres partes que han organizado este homenaje y felicidades a las mujeres y familiares de las mismas, porque por fin se les hace justicia al ejemplo que nos dieron.