Luchar contra los estigmas de las enfermedades mentales

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sábado, 8 de septiembre de 2018 | 9:42 0

Luchar contra los estigmas de las enfermedades mentales

MIGUEL CARDADOR LÓPEZ
(Presidente-Editor)


Para que un problema o una enfermedad pueda combatirse con altas proporciones de poder vencerla, lo mejor es hablar de ella. Y si son personas famosas que cuentan su experiencia, mejor que mejor.

Esto que estoy escribiendo es lo que ha ocurrido con los casos de depresión y otras enfermedades derivadas de la mente, a las cuales les han puesto voz, nada más y nada menos que estrellas de Hollywood.

A esta gente habitualmente se le admira por su trabajo y su estampa perfecta sobre la alfombra roja, en el cine y en la televisión. Sin embargo muchas se mueven como un torbellino en la ansiedad, la depresión, los desórdenes obsesivos compulsivos, la bipolaridad, etc. Como tantos millones de personas a lo largo y ancho del mundo, muchas estrellas de Hollywood saben bien lo que supone vivir con estos tormentos.

Despertar la conciencia colectiva y promover la aceptación debe ser el gran objetivo. Por ello es de agradecer y valorar que diversas celebridades hayan decidido hablar sobre su lucha personal por mantener a raya sus trastornos psiquiátricos.

A continuación pongo ejemplos reales de estas celebridades, como por ejemplo Demi Lovato, de 25 años, que ha recaído en su adicción al alcohol tras 6 años de permanecer sobria. Compartirlo forma parte de su nuevo proceso de rehabilitación. Ha comenzado a hablar abiertamente de su desorden bipolar.

Creada en la misma factoría Disney, Demi Lovato pasó gran parte de su vida sintiéndose vulnerable, triste y retraída: deprimida.

Fue internada en un centro de tratamiento psiquiátrico, donde comenzó su recuperación. “Obtener un diagnóstico resultó un alivio. Me ayudó a empezar a dar sentido a las cosas dañinas que estaba haciendo contra mí misma”.

Los recientes suicidios de la diseñadora Kate Spade, a los 55 años, y del chef Anthony Boutdain, a los 61 años, han puesto de relieve que la fama puede ser un caramelo envenenado.

Unos días antes la actriz Heather Locklear (56 años) fue hospitalizada después de que intentara quitarse la vida con una pistola en su casa. La protagonista de “Melrose Place” ya estuvo ingresada hace una década por una profunda depresión. Ella vive luchando contra la ansiedad.

Wilma Ryder (46 años), la estrella más admirada de los años 90, sufrió un ataque de ansiedad en una tienda de ropa, siendo además acusada de robar varias prendas. Ryder padece este tipo de ataques desde los 12 años.

La modelo británica Cara Delevigne (25 años), declaró que “la depresión es una constante en su vida y que mi creatividad es un escape, aunque a veces termino completamente agotada de mí misma”.

Kim Basinger (64 años) sufre de agorafobia, lo que ha supuesto un lastre para su carrera como actriz, desde que era una cría. La protagonista de “Nueve semanas y media” sufre de ansiedad social y pánico.

Así podríamos seguir con más gente conocida como Barbra Streisand, Chris Evans, Selena Gómez y otras muchas personas más de primer nivel mediático que padecen todo tipo de patologías mentales.

Es muy importante que estas personalidades hayan hecho públicas sus respectivas enfermedades, porque a pesar de que estamos en el siglo XXI todavía sigue habiendo muchos estigmas con todo lo relacionado con este tipo de enfermedades.

Siempre he dicho que todas las enfermedades son malas, pero las que se derivan de nuestra mente, tienen un grado más de sufrimiento.

Ahora que la mayoría hemos disfrutado de las vacaciones, podemos mirarnos y reflexionar que lo más importante para haberlo pasado bien, mal o regular, está basado en nuestro estado de ánimo, lo demás es secundario.

Perder el miedo a hablar de las enfermedades mentales es el primer paso para combatirlas y poder mejorar nuestra calidad de vida.

Igualmente que exponiendo cada enfermo sus experiencias y hablando sin tapujos, ayudará a otras personas que padezcan la misma o parecida, para que estos empiecen a perderle el miedo y con ello avanzar hacia una vida más plena y recobrar la esperanza de seguir mejorando.

Como nos dijo recientemente en su charla en Afemvap mi amigo y gran escritor pozoalbense, Juan Bosco Castilla Fernández, el escribir es una de las mejores terapias para todo lo relacionado con nuestra mente. Como por ejemplo escribir un pequeño diario, que es una buena manera para iniciarse en la literatura sin más pretensiones que el que nos produzca a nosotros mismos un efecto terapéutico, que hará que nos sintamos mucho mejor.

Ratifico plenamente lo dicho por Juan Bosco, porque yo lo he experimentado en primera persona.

Felicito a estas personas famosas que he mencionado en este artículo, por dar la cara para luchar contra los estigmas que aún existen por padecer una enfermedad mental.