Andalucía

DOLORES ARROYO
POZOBLANCO


Somos ocho hermanas
de la misma madre,
todas ellas alegres,
nacimos a la luz,
de un sol que renace.

El cielo es azul,
sin nubes que espanten,
claridad y color,
alegría y sabor,
de una tierra grande.

Cada una tiene peculiar
estilo, pero todas ellas
cantan al unísono.
coplas de su tierra
rasgando el delirio,
de las noches claras
con guitarras y vino.

Cascos que resuenan
ya en el olvido,
moros que dejaron
su vida y cariño,
impreso en murallas
en Granada inscrito,
su pasar por ella
demuestra el cariño.

Surtidores fluyen,
cipreses, palmeras,
evocan recuerdos
que en sus aguas llevan
sueños que cantaron,
indelebles huellas,
que se ven brillar
en cada plazuela.

Córdoba que tiene también
el instinto de tu hermana
mora, añejo sabor,
naranjo, olivo.

Azahar derrama
en la noche limpia,
de azules cristales
las estrellas brillan,
queriendo quedarse
por siempre prendidas,
sobre la Mezquita
cúpula divina.

Sevilla gitana,
que bailas trenzando
seguidillas, fandangos,
bulerías, tarantos,
sevillanas al son
de gargantas quebradas;
regadas con vino
en las madrugadas.

El Guadalquivir,
se lleva en sus aguas,
suspiros que puebla
la noche gitana.

Almería, Huelva, Cádiz, Málaga,
marinera, de casitas blancas,
prendes en tus redes,
trabajo, esperanzas,
y las ilusiones de hombres
que labran tus aguas,
buscando en su fondo
el pan, su mañana.

Jaén aceitunera,
olivos que pueblan
tu verde estampa,
regando de aceite
los líneos de España.

Todas ellas juntas
forman Andalucía,
singular y a la vez
todas ellas unidas.

Configuran esta tierra
para mi henchida,
de embrujo gitano,
duende, gracia, vida. 


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