Pedro Sánchez ha movido ficha

Comparte

viernes, 15 de noviembre de 2019 | 0:43 0

Pedro Sánchez ha movido ficha

MIGUEL CARDADOR LÓPEZ

(Presidente-Editor)


En el análisis de los resultados del pasado domingo hay que empezar por reseñar el grandísimo batacazo de Ciudadanos, que ha pasado de 47 diputados a la ridícula cifra de 10, lo que ha provocado la dimisión con urgencia de su líder, Albert Rivera. Esto los deja en una situación de extrema debilidad, que les puede llevar a medio plazo a desaparecer, como le pasó a la U.C.D de Adolfo Suárez.

Todos los politólogos y tertulianos vaticinaban una bajada importante de este partido, pero nadie esperaba esa caída tan brutal al fondo del pozo.

Por el contrario, es muy llamativa la gran subida de VOX, con 28 diputados más, alcanzando la cifra importante de 52 diputados.

Si sumamos los resultados de la extrema izquierda (Unidas Podemos, ERC y Más País), observamos que quedan por debajo del partido que ellos consideran de fachas y franquistas. No creo ni mucho menos que los más de tres millones de ciudadanos que han votado a VOX sean lo que denominan los referidos.

En el gran resultado de VOX ha tenido que ver en un importante tanto por ciento Pedro Sánchez, que le ha hecho el 50% de la campaña, influyendo igualmente la sentencia del “Procés”, las continuas y virulentas revueltas en Cataluña, la soez instrumentalización política de la exhumación del dictador Franco y las manifestaciones del presidente en funciones alarmando de “que viene el lobo de la extrema derecha”.

También en los resultados de Cataluña el independentismo se ha quedado por debajo del 50%, con lo cual la milonga que venden de que la mayoría de catalanes quieren la independencia es una falacia. Y eso que tienen todo el aparato de la Generalitat y además la potencian con la violencia y el amedrentamiento hacia el resto de ciudadanos que quieren seguir perteneciendo a España.

Por otro lado es importante reseñar también el resultado del Senado, pues el Partido Socialista ha perdido la mayoría absoluta que obtuvo en el mes de abril.

¿Qué es lo que han votado la mayoría de españoles?

Lo que han votado, es que el partido (en teoría) de centro izquierda, el PSOE, con 120 diputados, y el partido de centro derecha, el PP, con 89 (tras el escaño ganado en Vizcaya por el recuento del electorado en el extranjero en detrimento del PNV), suman 209 diputados, estando la mayoría absoluta en 176. Si a ello se le suman los de centro de Ciudadanos, 10, nos da un total de 219 diputados. Estos tres partidos (y alguno más como Navarra Suma o Coalición Canaria) hubieran sumado una mayoría aplastante de partidos constitucionalistas, que si tuvieran todos sus líderes suficiente madurez, sensatez y altura de miras estatal, les hubiera dado para conformar una gran y potente coalición moderada que estaría liberada de los continuos chantajes de los separatistas y de los que quieren destruir la Constitución Española y nuestro sistema político vigente, que ha dado el mayor y más prolongado período de paz, libertad y prosperidad a España en toda su historia.

Sin embargo, Pedro Sánchez, ante la pérdida de 3 diputados, ha corrido como el AVE para llegar a un acuerdo con el comunista Pablo Iglesias, para intentar gobernar en coalición ostentando, presumiblemente, este último la vicepresidencia.

Ahora se come, sin atisbo de pudor o vergüenza, muchas de sus propias palabras. Y donde el líder socialista hace dos meses decía digo ahora dice Diego, con lo que queda acreditado el valor que se le puede dar a su palabra, pues de su boca han salido textualmente manifestaciones como éstas: “Ni antes ni después, el partido socialista va a pactar con el populismo”, “El final del populismo es la Venezuela de Chávez, la pobreza, las cartillas de racionamiento, la falta de democracia y, sobre todo, la desigualdad”, “Unidas Podemos está planteando cosas muy peligrosas. Yo no puedo aceptar que digan que hay presos políticos en España. No los hay”, “Si yo llegara a un acuerdo con Unidas Podemos y Pablo Iglesias y miembros de su partido estuvieran como ministros en este posible gobierno, sería un presidente del gobierno que no dormiría por la noche, junto al 95% de ciudadanos de este país que tampoco se sentirían tranquilos”

¡Qué rápido se le ha pasado el temor al insomnio, y cómo queda retratado una vez más!

El señor Sánchez ha movido ficha hacia la izquierda extrema cuando, por cierto, Unidas Podemos también ha perdido apoyos, restando con 7 diputados menos.

Vamos a ver si este hipotético y futurible gobierno denominado “progresista” (qué bien suena esta palabra para manosearla, prostituirla y distorsionar y manipular los conceptos y las realidades) no va a tener que apoyarse necesariamente en partidos como Más País, un sucedáneo de Podemos, partidos regionalistas, PNV y, posiblemente, hasta la abstención de los republicanos independentistas catalanes de ERC. Sin saber lo que harán los filoetarras de E.H. Bildu (que ya le ayudó al PSOE para conseguir este el gobierno de Navarra) o los anarquistas separatistas de la CUP, que eran los únicos que faltaban en el Congreso para completar el puzzle de enemigos de España.

Prácticamente todos los referidos, que podrían ser decisivos a la hora de investir a Sánchez, son partidos antisistema, que tienen como principal pretensión fragmentar y dividir a España y dinamitar la Constitución Española, y que además van a ir con el cazo preparado para recoger los cientos de millones de euros que van a pedirle por dicho apoyo, privando los intereses de cada uno y de sus comunidades antes que el bien común y el interés general de España.

Pero ante todo, guste más o menos, es importantísimo que ahora se forme gobierno. Aunque el tiempo, que es el verdadero juez que certifica con total realidad lo positivo y lo negativo, nos dirá si el gobierno que se pueda conformar va a satisfacer las expectativas y necesidades reales de los españoles. Primero, con el tiempo, se verá si se llega hasta el final de la legislatura (cosa nada fácil con la disparidad de partidos e intereses), y luego, si se consigue, se verá cómo estaremos dentro de cuatro años, sobre todo en el capítulo económico y en el déficit.

Yo, particularmente, viendo la enorme influencia que pueden tener en esta legislatura partidos muy desleales con la Constitución y muy poco fiables en la esencia y espíritu democráticos, tengo más que serias dudas de que dentro de casi un lustro estemos mejor que ahora. Pero lo importante será el formar ya un gobierno, y yo, como demócrata, es lo que deseo Y ojalá que, cuando pase la legislatura, sea yo el que me haya equivocado, porque eso por encima de cualquier ideología significará que los españoles hemos mejorado.

En lo que respecta a los resultados de nuestra comarca, lo más significativo ha sido el aumento considerable de VOX, que incrementa en un 50% sus votos, subiendo en todos los pueblos, a excepción de Conquista, que ha sacado tres votos menos que en abril.

Por otro lado Unidas Podemos pierde un 18% de votos, restando en todos los pueblos, a excepción de Santa Eufemia, que suma cuatro votos más, por lo que se demuestra que Los Pedroches, para nada están con la República, como algunos nos quieren vender.

En términos globales el PSOE pierde más de 1000 votos mientras que el PP suma 500 votos más.

Y extrapolando a las municipales del pasado mayo, se demuestra que en Villanueva de Córdoba, en la alcaldía gana la persona concreta, con Dolores Sánchez del PP, ya que en las generales el PSOE obtiene en dicha localidad el doble de votos que el PP.

En el mismo paralelismo está Pozoblanco, que si en las generales obtiene 400 votos menos que los socialistas, en las municipales el PP goleó a los del puño y la rosa con el doble de concejales. Lo que quiere decir que Santiago Cabello lo hizo muy bien a juicio de sus paisanos en los dos años que estuvo como alcalde en la anterior legislatura, y que la candidata socialista pozoalbense tenía muy poco peso y carisma para encabezar el partido que más ha gobernado con diferencia desde la democracia en Pozoblanco.

Los ciudadanos han hablado con su responsabilidad de depositar el voto en las urnas, ahora les toca a los políticos remangarse y trabajar con honradez y cordura, unos gobernando y los otros en la oposición.